El cáncer de pulmón continúa siendo a día de hoy una lacra silenciosa. Es una patología que por lo general se diagnostica en estadíos avanzados porque no da síntomas hasta que está avanzada. La incidencia, según la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN) fue en 2022 de 30.948 casos, eso significa 65 de cada 100.000 personas al año. Entre 2002 y 2020, la incidencia ajustada por edad se incrementó en mujeres de 13,4 a 29,7 casos anuales por cada 100.000 mujeres y en hombres disminuyó de 123 a 99.
El cáncer de pulmón supone el 13,9% del total de cánceres en hombres, siendo el segundo más frecuente, mientras que en mujeres representa el 7,2% del total de cánceres, siendo ya el tercero más frecuente tras los cánceres de mama y colorrectal, según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM)
Sin embargo, la supervivencia de los pacientes ha aumentado en los últimos años gracias a los avances en tratamientos personalizados, terapias dirigidas y técnicas quirúrgicas avanzadas.
En concreto, en hombres es del 37% al año del diagnóstico, del 17% a tres años y el 13% a 5 años. En mujeres, los datos mejoran, aunque la incidencia aumenta rápidamente desde los años 90. Es de 45% a un año, del 24% a tres años y del 18% a 5.
Según la Asociación española contra el cáncer (AECC), la edad media al fallecimiento por cáncer de pulmón en España es de 68 años entre los hombres y 66,6 entre las mujeres.
La investigación es un pilar fundamental en la búsqueda de tratamientos más efectivos y en la comprensión de los mecanismos subyacentes del cáncer de pulmón. Recientes estudios han arrojado luz sobre nuevas perspectivas en el tratamiento de esta enfermedad, desde avances en inmunoterapia hasta terapia génica, prometiendo un futuro más esperanzador para los pacientes afectados por el cáncer de pulmón.
Los cirujanos torácicos de La Salud realizan el diagnóstico y tratamiento incluyendo la cirugía tras ser valorado por un comité interdisciplinar conformado por neumólogos, oncólogos y radioterapeutas. De forma conjunta, establecen un tratamiento y la posibilidad de tratamientos combinados.
En la Unidad también valoran lesiones inespecíficas del tórax que a veces se detectan en pruebas de Diagnóstico por la Imagen y que pueden acabar derivando en un cáncer. Tratadas de forma precoz, se puede conseguir la total curación.
“El principal problema del cáncer de pulmón es que es un cáncer silencioso. Tarda mucho en dar síntomas y cuando se detecta es tarde”, asegura el Dr. Marcelo Galbis, cirujano torácico del hospital La Salud.
“Es conveniente- añade-realizar un screening de pacientes que por edad o por hábitos como el tabaco, puedan tener predisposición a padecer esta patología. Recomendamos en este sentido realizar una simple radiografía de tórax de forma periódica”.
Es una prueba sencilla sin apenas radiación y que nos permite detectar rápidamente signos que nos puedan poner sobre aviso. Detectada de forma temprana, el índice de supervivencia se multiplica x 5 e incluso puede llegar a curarse.
Post revisado por el Dr. José Marcelo Galbis