El torero de Jerez evoluciona favorablemente y los médicos reconocen que podría torear en Castellón si sigue así.
Valencia, 14 de marzo de 2017.- El torero Juan José Padilla se halla ingresado en el Hospital Casa de Salud donde se recupera de la cogida que sufrió el pasado domingo 12 de marzo en la Plaza de Toros de Valencia. Según el equipo médico que le ha atendido dirigidos por el Dr. Zaragozá, el torero “sufre heridas graves en el axilar izquierdo y traumatismo torácico.”
Según acaba de afirmar el Dr. Zaragozá, “lo acabamos de curar y el drenaje se encuentra bien, sin hematomas ni infecciones por lo que si sigue así, podría torear en Castellón, eso sí, con los puntos todavía.” El médico del hospital valenciano ha reconocido que el ánimo del torero es envidiable y que “al nutrirse correctamente y estar apoyado por su entorno familiar, y su estado de ánimo, podrá torear en una semana si la evolución sigue así, pese a que, como todos sabemos, las heridas de asta de toro necesitan una semana de tiempo por el riesgo de infección” .
Como se recordará, el torero conocido también como “el ciclón de Jerez” sufrió una cogida en la tarde del domingo mientras toreaba al toro “Hortensia” en la Feria de Fallas de Valencia. Tras operarlo en las dependencias de la enfermería del coso valenciano, el torero fue trasladado a las dependencias del Hospital Casa de Salud, donde sigue ingresado. En un primer momento, el Dr. Zaragozá en su parte médico afirmó ya que “las heridas están bien y no tiene fiebre, pero habrá que esperar un par de días para ver su evolución”. Según el médico, “ha tenido mucha suerte ya que el pitón se quedó sólo a dos centímetros de la femoral y si hubiese viajado en sentido contrario se habría afectado, además, también le rozó la axilar, otro vaso tan importante como el de la ingle”.
El torero de Jerez se mostró en todo momento muy animado y, de hecho, sigue pensando en torear en la siguiente Feria que es la Magdalena de Castellón, “me encuentro bastante dolorido- ha afirmado el torero- pero estoy contento porque han sido dos cornadas que me podrían haber traído problemas, pero Dios ha desviado el pitón para que no llegara al corazón”. El torero ha tenido también palabras de agradecimiento para el hospital y el personal que le ha atendido.