Correr una prueba de larga distancia representa un reto único, una meta que muchos se proponen para superar sus límites físicos y mentales. No obstante, este desafío también implica un desgaste significativo para nuestro cuerpo, especialmente para el sistema cardiovascular. Hace unas semanas, durante el Medio Maratón de Madrid, un atleta sufrió un paro cardíaco repentino a pocos metros de la meta, mientras que otro corredor de 21 años fue ingresado en estado grave por una parada.
En los últimos cuatro años, en España, seis personas han fallecido durante pruebas de atletismo populares. Estos datos nos llevan a reflexionar: ¿están los corredores realmente preparados para someterse a un esfuerzo de esta magnitud? ¿Conocemos el estado de nuestro corazón?
En el momento que decidimos correr un maratón, el corredor se focaliza en correr muchos kilómetros, alcanzar un ritmo constante y mejorar su resistencia. Se trabaja muchos aspectos, pero la gran olvidada en nuestra salud cardiovascular.
Correr más de 21 kilómetros implica una demanda elevada de oxígeno y una respuesta intensa del corazón. Aunque una persona pueda sentirse bien o verse en forma, es posible que existan condiciones cardíacas ocultas que solo se manifiestan ante un esfuerzo extremo. Algunas, lamentablemente, pueden desencadenar eventos graves como un infarto o una arritmia maligna.
La respuesta es: muchas más personas de las que se creen exentas. Estas son algunas situaciones en las que es altamente recomendable acudir al cardiólogo antes de iniciar un entrenamiento exigente o participar en una carrera:
· Si tienes más de 35 años y no practicas ejercicio de forma regular.
· Si tienes antecedentes familiares de enfermedades cardíacas, infartos o muerte súbita.
· Si presentas factores de riesgo como hipertensión, colesterol elevado, obesidad, tabaquismo o diabetes.
· Si has experimentado síntomas como palpitaciones, mareos, fatiga desproporcionada o dolor en el pecho durante el ejercicio.
Incluso si no tienes síntomas ni antecedentes, si es tu primera media maratón, realizar un chequeo preventivo es una medida inteligente.
En el Hospital La Salud contamos con una Unidad de Cardiología especializada que ofrece estudios completos para deportistas y personas activas. Uno de los más útiles es la prueba de esfuerzo.
Este examen permite observar cómo reacciona tu corazón ante una carga progresiva de ejercicio físico. Se monitoriza la actividad eléctrica del corazón, la frecuencia cardíaca, la presión arterial y otros parámetros.
Gracias a esta prueba, podemos detectar alteraciones que no se manifiestan en reposo, como arritmias, falta de riego sanguíneo (isquemia) o problemas en la recuperación cardíaca.
Además, los resultados sirven para personalizar el entrenamiento, indicando hasta qué intensidad puedes ejercitarte de manera segura.
El ejercicio físico regular tiene múltiples beneficios, eso no está en duda. Sin embargo, también es fundamental que cada persona conozca sus límites y entrene de forma responsable.
No se trata de generar miedo, sino de promover la prevención activa. Un simple chequeo puede marcar la diferencia entre una carrera disfrutada y una situación de riesgo.
En el Hospital La Salud, te ayudamos a cuidar lo más importante: tu salud.
¡Cuida tu corazón antes de exigirte al máximo!