La cena de Nochebuena, la comida de Navidad, la cena de Nochevieja, la comida de Año Nuevo, la cena con Roscón y la comida del día de Reyes. Como mínimo, la mayoría de españoles harán estas seis comidas especiales durante estas fiestas. Quizá alguien se salte una pero seguro que la sustituye con una cena de empresa, de amigos o de vecinos… Normalmente, en este tipo de citas, las comidas tienden a ser copiosas y pesadas, sin contar la ingesta de alcohol, que también aporta un alto nivel calórico.
Los nutricionistas del Instituto Valenciano Digestivo, perteneciente al Hospital La Salud de Valencia, han elaborado un recetario solidario que incluye 18 recetas navideñas (entre aperitivos, entrantes, platos principales y postres) con la que tratan de encontrar un equilibrio entre comer de manera especial y que nuestro peso no aumente de manera considerable cuando terminemos estas fiestas.
Estos expertos han calculado que cada uno de esos menús pueden alcanzar, sin ningún problema, las 1.100 calorías. Por ejemplo, un menú que consista en un hojaldre relleno, canapés de foie y una ración de cochinillo con patatas puede superar, sin que las raciones sean demasiado grandes, las 1.300 calorías. Sin contar ni postre ni bebidas. Un gin-tonic puede suponer 200 calorías más. Y ya no hablemos de varias copas de vino, el chupito de después, refrescos, etcétera.
Con los platos propuestos en el recetario de Ivadi se puede reducir casi a la mitad este aporte calórico. Si convencemos a nuestra familia para confeccionar un menú con el roast beef mediterráneo que se detalla en nuestro recetario, la piña asada y la ensalada tropical, el número de calorías no sobrepasaría las 700 calorías.
La cuenta que hacen desde el Instituto Valenciano, por lo tanto, es bastante sencilla. Multiplican esas 1.100 calorías de las comidas navideñas tradicionales por seis comida y la cifra que obtienen es de 6.600. Hacen lo mismo con las 700 calorías que podría contener un menú hecho a base de platos propuestos en el recetario: 2.400 calorías es el resultado. La reducción, si hacemos la resta, es de 2.200.
“Hemos hecho una cuenta aproximada e incluso por lo bajo de lo que solemos comer en ese tipo de encuentros. Pero bueno, creemos que es la mejor manera de que la gente vea la gran cantidad de calorías que pueden reducir siguiendo nuestras recetas, que no por sanas dejan de ser atractivas”, explica la nutricionista Vanessa Martín, una de autoras de este libro de recetas que se puede adquirir en el Hospital La Salud y en la web www.ivadi.es por 5 euros.
Montaditos con anchoas y parmesano laminado, o elaborados a base de salmón y caviar. Arroz caldoso con pulpo, pato a la naranja o pastel de atún. Sorbete de frutos rojos o flan de turrón. Los nutricionistas de Ivadi proponen para estas Navidades 6 aperitivos, 6 entrantes, 3 platos principales y 3 postres. Además, incluyen otros 4 entrantes, 6 platos principales y 8 postres pensando para cualquier época del año. Entre este amplio número de recetas adicionales encontramos pasta con brócoli y setas, croquetas de espinacas y champiñones y cake de higos. Todas ellas repletas de ingredientes saludables y perfectamente equilibradas.
“Nuestra intención era confeccionar un recetario variado, para todos los gustos, que entremezclara tanto carne como pescado, y una buena cantidad de verduras. Pero sobre todo hemos tratado de que los platos parezcan algo sofisticados pero muy sencillos de hacer, además de baratos. Para que a nadie le dé pereza optar por ellos y que tampoco piense la gente que le va a salir por un ojo de la cara. Son recetas saludables pero que solo con ver las fotos del recetario, te entran ganas de hincarles el diente”, detalla Vanessa Martín.
Esta experta en Nutrición no solo aconseja a la gente seguir las recetas de esta nueva publicación de Ivadi. También considera que sería bueno que cada persona se hiciera un pequeño calendario de todos los eventos gastronómicos que tiene por delante, para ser consciente de todo lo que va a comer. “Es obvio que nos vamos a pasar algún día pero también es bueno que sepamos el número de días que vamos a hacerlo, ya que así, en alguna de las citas, uno puede reducir el exceso… De alguna forma, ir con el freno de mano un poco más echado. Lo ideal, si comemos en casa, es que las recetas sean lo más saludables posibles y que, sin obsesionarnos, midamos un poco las calorías de cada uno de los platos. Porque como vemos, no está reñido comer sano, con comer rico”, argumenta Martín.
El compromiso del Instituto Valenciano Digestivo con la educación alimentaria es más que evidente. En el último año han hecho más de 10 talleres en Valencia en este sentido. Desde uno de alimentación saludable a otro de patologías digestivas y su alimentación. Aparte de todos los tratamientos que ofrece, le da mucha importancia a la prevención, que no es otra que alimentarnos lo más correctamente posible.