Iniciamos el tiempo del Adviento. Una oportunidad para prepararnos para la Navidad y reflexionar sobre lo vivido durante el 2024. En el Hospital La Salud queremos aprovechar este espacio para hacer balance de todo lo que hemos compartido, aprendido y superado juntos.
El primer domingo 1 de diciembre, inauguramos nuestro calendario de Adviento.
En el hospital, el Adviento adquiere un significado profundo. Es un momento para fortalecer nuestra comunidad y recordar la importancia de estar al servicio de quienes más nos necesitan. En este primer domingo de Adviento, hemos dado inicio a esta tradición con un espíritu de unión, buscando renovar nuestro compromiso con los valores de humanidad, solidaridad y cuidado que nos guían cada día.
Queremos llenar el mes de diciembre con pequeños actos y reflexiones que nos acerquen a los demás y nos preparen para celebrar el cierre de este año con gratitud y esperanza. Invitamos a todos a unirse a este camino, en el que cada día nos enseña algo nuevo sobre compartir, ayudar y acompañar.
Hoy destacamos un proyecto muy especial impulsado por la Fundación Juan Bonal en 2024, en colaboración con el Centro de Salud de Kivumu en Ruanda. Este centro, gestionado por las Hermanas de la Caridad de Santa Ana, brinda atención a más de 44,000 pacientes anualmente, ofreciendo un servicio esencial a las personas más vulnerables de la comunidad.
El proyecto tiene como objetivo dotar al Centro de Salud de los recursos necesarios para continuar con su importante labor. Con la colaboración del Hospital La Salud, se ha trabajado para cubrir dos necesidades clave: una ambulancia para el traslado de los pacientes al Hospital de Gisenyi, a 27 km de distancia, y un ecógrafo para el seguimiento de embarazos y partos, mejorando así la atención a las más de 1,000 mujeres que dan a luz cada año en el centro.
Este proyecto se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, especialmente el Objetivo 3 (Salud y bienestar) y el Objetivo 10 (Reducción de las desigualdades), y refleja el compromiso de todos los involucrados por mejorar la calidad de vida y la salud de las personas más desfavorecidas.
Gracias a la solidaridad de todos, este proyecto se ha hecho realidad, permitiendo al Centro de Salud de Kivumu seguir ofreciendo atención médica de calidad a quienes más lo necesitan.
el Equipo de Acogida, un servicio gratuito que el centro pone a disposición de pacientes y familiares para atender todas sus necesidades: emocionales, espirituales, sociales y de escucha. Este equipo se basa en los valores de hospitalidad, amabilidad, honestidad y acogida, que son los pilares de la institución y se reflejan en cada uno de sus actos.
Este proyecto tiene como objetivo hacer que los valores del hospital sean tangibles y reales para las personas que acuden al centro. En muchas ocasiones, los pacientes y familiares solo necesitan alguien con quien hablar o sentirse acompañados en momentos de angustia.
En este hospital, cada persona es tratada con el mayor respeto a su libertad y dignidad, y se trabaja para humanizar la atención sanitaria, poniendo siempre a la persona en el centro de todo. Hoy, recordamos el esfuerzo de este equipo por cuidar a las personas con todo el amor y dedicación posibles, más allá de lo médico, respondiendo a las necesidades emocionales y espirituales de quienes más lo necesitan.
Una hermosa iniciativa del hospital: los conciertos de música para pacientes en la UCI, en diálisis o ingresados. La música tiene múltiples beneficios para la salud, como la reducción del estrés, la ansiedad y el dolor, mejorando el estado de ánimo y promoviendo la relajación.
Estos conciertos son una forma de humanizar la atención, ofreciendo a los pacientes momentos de bienestar emocional y ayudándoles a sentirse acompañados en su proceso de recuperación. La música, además de ser un alivio emocional, favorece la salud integral de quienes más lo necesitan.
En este día del calendario de Adviento, celebramos el Día de las Familias, una ocasión especial para reconocer la importancia de la familia como núcleo de apoyo y amor.
En julio en el Hospital de la Salud, se celebra una misa en honor a San Joaquín y Santa Ana los padres de la Virgen María, quienes son símbolos de la familia y la fe. Al concluir la misa, se organizan actividades que reúnen a las familias, creando un espacio de fraternidad y esperanza .
Es un momento para reflexionar sobre el amor incondicional, la unidad familiar y la paz que llega con el nacimiento de Jesús. Esta es una forma de recordar que, mientras esperamos la llegada de Cristo, la familia es un pilar fundamental en nuestro caminar hacia la Navidad.
En este día del calendario de Adviento, hablamos del Espacio de Silencio que el Hospital de la Salud ha dispuesto para toda persona que necesite un momento de recogimiento y paz. Este espacio está diseñado para ofrecer un refugio donde cualquier persona, pueda encontrar un lugar tranquilo para rezar, meditar o simplemente estar en silencio, reduciendo el estrés y la tensión diaria.
Este espacio es parte integral del Proyecto de Pastoral del hospital, cuyo objetivo es ofrecer un lugar de reflexión y consuelo para quienes transitan por el centro, creando un ambiente de apoyo espiritual y emocional para todos.
En estos primeros días del Adviento, hemos
reflexionado sobre la luz, la paz, la preparación interior y el apoyo que
encontramos en nuestras familias y comunidades. El Calendario de Adviento nos
invita a vivir con más conciencia y esperanza, y a reconocer que, incluso en
medio del ajetreo, podemos encontrar momentos de calma, como el Espacio de Silencio, para renovar
nuestra fe y nuestro espíritu. Cada día es una oportunidad para acercarnos a
los valores que nos unen y preparar nuestro corazón para la llegada de Jesús.