La cistitis es una inflamación de la vejiga que afecta en mayor medida a las mujeres. Según la Asociación Española de Urología entre el 50 y el 60% de las mujeres premenopáusicas sufre alguna infección del tracto urinario, el 90% de las cuales son cistitis. El pico de incidencia, advierten, “se observa entre los 18 y los 39 años coincidiendo con la edad de máxima actividad sexual en la mujer. Según un estudio publicado en BMC Urology, casi 4 de cada 10 mujeres ha sufrido o sufrirá al menos un episodio de cistitis en su vida y el 12% las sufre de forma recurrente
La mayoría de las veces es causada por una infección bacteriana que puede ser dolorosa e irritante y que habitualmente provoca muchas ganas de orinar frecuentemente y en pequeñas cantidades, sensación de ardor, molestias pélvicas, y en ocasiones puede llegar incluso a provocar sangre en la orina y algo de fiebre. Puede llegar a ser peligrosa si se propaga a los riñones. Por ello, al más mínimo indicio, es necesario acudir al médico.
Con menor frecuencia, la cistitis aparece como una reacción a algún tratamiento o medicamento como la radioterapia o el uso prolongado de un catéter pero también la pueden provocar ciertos geles espermicidas o productos de higiene femenina.
El tratamiento más habitual para la cistitis bacteriana son los antibióticos. Si bien en casos de reacción a un tratamiento no es evitable, sí se pueden mantener ciertos hábitos para intentar prevenirla: