Dermatología médico-quirúrgica y Venereología

Profesionales de la especialidad

Dermatología médico-quirúrgica y Venereología

La dermatología médico-quirúrgica se ocupa del conocimiento del órgano más visible del cuerpo: la piel y las enfermedades que le afectan. 

La Venereología, por su parte, estudia, diagnostica y trata las enfermedades de transmisión sexual (ETS) que en muchos casos tienen variadas manifestaciones cutáneas. 

Una parte importante del trabajo de los profesionales es la prevención de las enfermedades relacionadas con la piel, cabello, uñas y mucosas. Para ello es necesario que recuerdes:

    • Realizar una revisión periódica de tus lunares o nevus: lo más recomendable es que lo hagas una vez al año. En estas revisiones los dermatólogos identificamos lesiones sospechosas que exigen bien vigilancia estrecha, bien su extirpación. Durante estas revisiones somos capaces de detectar no solo melanomas sino también otros tipos de cáncer de piel que pueden tratarse con éxito de forma precoz.
    • Usar fotoprotección todo el año con el índice adecuado según la época, no solamente cuando vayamos a tomar el sol, sino también para salir a la calle, aunque llevemos mascarilla puesta.

De cara a cuando llega el buen tiempo y para lograr los beneficios del sol sin generar un peligro en la piel, la Academia Española de Dermatología recomienda:

  • Usar siempre factores de protección elevados y más en niños
  • Poner la protección 30 minutos antes de la exposición al sol y renovarla cada 2-3 h.
  • Evitar tomar el sol de 13h a 16h.
  • Exponernos al sol de forma progresiva, de menos a más
  • Empezar a exponerse al sol 5 minutos el primer día e ir subiendo paulatinamente hasta los 15-20 minutos
  • Si se está más tiempo al sol, aparte de utilizar cremas fotoprotectoras u otras vías de protección para prevenir la quemadura, mejor ponte a la sombra.
  • Protege tu cabeza con una gorra y utiliza prendas que te protejan del exceso de sol. 
  • Y recuerda que la hidratación también es muy importante en días calurosos, sobre todo en niños y ancianos. 
  • Toma dos litros de agua al día y no esperes a tener sed

Patologías

Cáncer de piel

MELANOMA

 


 

Es menos frecuente que otros tipos de cáncer de piel, pero es el más grave y peligroso. Un tumor maligno con mal pronóstico si se diagnostica tarde. De ahí la importancia de las revisiones de los lunares para detectar precozmente esta patología.

Se puede desarrollar en cualquier parte de la piel, pero es más frecuente en el tronco (pecho y espalda) en los hombres y en las piernas en las mujeres. También es común en cara y cuello.

La incidencia solamente de melanoma en España es de media, de más de 6.000 casos según la Sociedad Española de Oncología médica. En 2017 casi 1.000 personas fallecieron a causa de este cáncer de piel.

 

CARCICOMA BASOCELULAR

 


 

Es más frecuente que se desarrolle en las zonas más expuestas al sol y aparece como un cambio en el aspecto de tu piel.

Se aprecia normalmente como una tumoración cutánea con costra hemorrágica en superficie que se desprende y no llega a curar completamente.

 

CARCICOMA EPIDERMOIDE

 


 

Aparece frecuentemente en forma tumoración ulcerada de rápido crecimiento. Puede ser agresivo y se muestra normalmente en las zonas que han estado expuestas al sol. Tiene capacidad para metastatizar.

 

TUMORES BENIGNOS DE PIEL

 


 

Nevus o lunares

Son manchas de la piel de color marrón o negruzco que deben diferenciarse de las pecas que aparecen o desaparecen según la exposición al sol. Son lesiones cutáneas benignas y frecuentes. Sin embargo, su control en muy importante para evitar que se conviertan en un melanoma.

Pueden tener un aspecto diverso: desde una pequeña mancha hasta una lesión de color marrón oscuro. La superficie puede ser rugosa y puede tener distintas tonalidades de marrón. Si no hay cambios en el aspecto y son pequeños, basta con realizar una revisión anual de los nevus para asegurarnos de que no se han malignizado.

Sospecha de la transformación de un lunar si se da lo siguiente

ABCDE:

      • Asimetría. Lunares con crecimiento asimétrico.
      • Bordes irregulares.
      • Coloración distinta de una zona a otra del mismo lunar.
      • Diámetro mayor de 6 mm (el grosor de un lapicero).
      • Evolución temporal con cambios en poco tiempo
      • Lunares que sangren.
      • Lunares que piquen o duelan.
      • Cambios en su forma o en su tamaño en poco tiempo.

Dermatitis Seborreicas (caspa)

Es una afección inflamatoria crónica cutánea bastante común. Cuando ocurre en el cuero cabelludo es la famosa caspa. Provoca una descamación fina en la cara o el cuero cabelludo alternando fases de crisis y fases de remisión. Normalmente se debe a la combinación de varios factores: debilitación del sistema inmunitario, carencia de ciertos nutrientes, alteraciones hormonales, problemas del sistema nervioso y factores genéticos. Otra posible causa es un hongo llamado Malassezia.

Los factores de riesgo que pueden fomentar o acelerar la dermatitis seborreica son:

      • Estrés o cansancio.
      • Climas extremos.
      • Piel grasa o problemas de esta, como el acné.
      • Poca frecuencia en la limpieza de la piel.
      • Uso de lociones que contengan alcohol.
      • Obesidad.
      • Afecciones neurológicas como la enfermedad de Parkinson, un traumatismo craneal o un accidente cerebrovascular.
        Virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).

Se puede tratar con champús o con medicamentos específicos. Tu médico te dirá cuáles son los más recomendables para ti.

Psoriasis

Es una enfermedad crónica frecuente en la piel que provoca la aceleración del ciclo de vida de las células cutáneas que se acumulan rápidamente en la superficie de la piel y generan escamas y manchas que pican y a veces duelen.

No tiene cura, pero sí tratamiento para aliviar los síntomas. Tu médico te recomendará cuál es el más adecuado para ti. Actualmente, en formas graves y extensas se utiliza la terapia biológica.

Eczemas de contacto/
Dermatosis profesionales 

El contacto con sustancias tóxicas o alguna alergia a ciertas sustancias, pueden provocar eczemas que conllevan la aparición de placas descamativas en la superficie cutánea. La dermatitis atópica puede ser persistente y es habitual que reaparezca aun si el tratamiento aplicado ha sido exitoso. Es importante detectarla lo antes posible para que puedas empezar el tratamiento en sus fases tempranas.


Mantener la piel húmeda ayuda, pero es muy probable que tu médico deba recurrir a otros tratamientos como cremas con corticoide, cremas antibióticas en caso de infección bacteriana o medicamentos orales.


En cuanto a las terapias los vendajes húmedos o en ciertos casos la fototerpaia pueden ayudarte. También es importante que aprendas a relajarte y a modificar tui conducta en caso de que tengas el hábito de rascarte. En lugar de hacerlo, puedes probar presionándote la piel.

Dermatitis atópica 

Hay una forma que se presenta en adultos que suele ser más grave que la patología durante la infancia.

Alopecia androgénica (calvicie)

La alopecia androgénica o androgenética es la calvicie común. Afecta de forma bastante habitual a los hombres


A partir de los 25 años, uno de cada cuatro hombres va a sufrirla. Con más de 50 años la mitad de los hombres son calvos y en la vejez, el 98%. Lo habitual es que se pierda cabello de forma selectiva en algunas zonas, sobretodo en la región frontal y parietal.


En el caso de las mujeres, un 50% ha sufrido caída de cabello en algún momento. No suele ser de la parte frontal sino más bien de la zona temporal y occipital.
Se debe a un aumento de las hormonas masculinas o andrógenos sobre ciertas áreas del cuero cabelludo que provocan la disminución progresiva en la actividad de folículo piloso.


Hay multitud de productos y publicidad que dice evitar la caída del cabello o incluso que promete el crecimiento del pelo. Hay que tener mucho cuidado con estos productos ya que la mayoría no tienen ninguna base científica. Los tratamientos existentes son escasos y siempre deben ser supervisados y recomendados por un médico.

ETS

Las Enfermedades de Transmisión sexual engloban distintas patologías que afectan generalmente a la piel y por lo tanto deben ser tratados por un dermatólogo/a.


Los condilomas genitales o verrugas genitales, la sífilis, la clamidia, la gonorrea, el ViH, los carcinomas o las displasias son alguna de la ETS que tratamos en la consulta. Cuando la infección afecta a la zona de la vagina o la vulva, la patología debe tratarla un ginecólogo/a.

Dermatología cosmética

En la consulta de Dermatología también se realizan diferentes tratamientos dirigidos a la mejora del estado de la piel

    • Foterrejuvenecimiento con luz pulsada (IPL)
    • Arañas vasculares y varículas con láser vascular
    • Toxina botulínica (Botox) para el tratamiento de arrugas en el tramo superior de la cara
    • Peeling químico para el mantenimiento y rejuvenecimiento de manchas en la cara producidas por la edad

Para ello, contamos con el siguiente equipamiento:

  • Laser Nd-Yag 1064 de Cutera.
  • Aparato de Luz Pulsada Intensa Quantum HR-SR de Lumenis.