Obstetricia y ginecología en Valencia

La Obstetricia y Ginecología es una especialidad de contenido amplio y variado. 

Los obstetras trabajan con mujeres durante toda la fase del embarazo y al dar a luz. Por otro lado, los ginecólogos se preocupan por el sistema reproductivo femenino mientras tratan y manejan una variedad de enfermedades. 

Nuestra Unidad de Obstetricia y Ginecología en Valencia entienden de:

  • Los fenómenos fisiológicos y patológicos de la reproducción humana, de la fisiología de la gestación, parto y puerperio.

     

  • Sus desviaciones patológicas: de la fisiología y patología inherente a los órganos que constituyen el tracto genital femenino, incluyendo la mama, de los aspectos preventivos, psíquicos y sociales que necesariamente se relacionan con los apartados anteriores.

Ginecología en Valencia

El Hospital dispone de los mejores especialistas en Ginecología en Valencia. 

Los ginecólogos y especialistas en Obstetricia y Ginecología de La Salud están preparados, además de para atender todo lo relacionado con su especialidad, también, al menos de forma orientadora, como médicos primarios de la mujer.

Hay varias unidades en el hospital relacionadas con la Obstetricia y la Ginecología como por ejemplo diagnóstico prenatal o patología mamaria.

Los mejores ginecólogos en Valencia: conoce al equipo

En La Salud disponemos de múltiples equipos de ginecólogos y obstetras. 

Además, también acogemos a multitud de equipos que, pese a tener sus clínicas de ginecología y obstetricia fuera del hospital, dan a luz y realizan sus cirugías en La Salud. 

En la parte superior de esta página, podrás encontrar a todos los profesionales que pasan consulta y tienen su clínica ginecológica en el hospital.

Pide cita con tu ginecólogo en Valencia

Desde cita online en esta misma página puedes pedir cita con cualquiera de nuestros ginecólogos. También puedes hacerlo mandando un mail a citaprevia@casadesalud.es o llamándonos al 96.389.77.00

Obstetricia y Ginecología

Es una especialidad de contenido amplio y variado que entiende:

  • de los fenómenos fisiológicos y patológicos de la reproducción humana,
  • de la fisiología de la gestación, parto y puerperio,
  • así como de sus desviaciones patológicas, de la fisiología y patología inherente a los órganos que constituyen el tracto genital femenino, incluyendo la mama,
  • de los aspectos preventivos, psíquicos y sociales que necesariamente se relacionan con los apartados anteriores.

Los especialistas en Obstetricia y Ginecología están preparados para actuar, al menos de forma orientadora, como médicos primarios de la mujer.

¿Cuándo acudir al ginecólogo?

Exceptuando los primeros años, la mujer debe acudir al ginecólogo/a durante toda su vida.

Durante la adolescencia, el embarazo, el parto y puerperio, pero a partir de ese momento, si eres mujer, no debes dejar de revisarte nunca porque cada etapa de tu vida va a requerir cuidados médicos específicos.

Si tienes entre 20 y 45 años

Debes realizarte revisiones anuales para prevenir cualquier patología que puedas tener y detectarla de forma temprana.

Revisiones de Ginecología

En cada revisión te vamos a hacer:

CITOLOGÍA

Se realiza para el diagnóstico del cáncer de cuello uterino. Es una prueba sencilla e indolora. Se realiza en mujeres que ya han iniciado las relaciones sexuales.

ECOGRAFÍA PÉLVICA O VAGINAL

Según tengan o no relaciones sexuales para descartar patología ovárica o uterina (miomas, pólipos, quistes)

EXPLORACIÓN MAMARIA

Exploración mamaria, se realiza para detección de nódulos. Para su confirmación se solicita una ecografía mamaria.

A partir de los 35 años se solicita una mamografía para la detección precoz del cáncer de mama. Se repite cada 2 años hasta los 40 y a partir de los 40 se solicita de forma anual.

ANÁLISIS

Solicitud de pruebas complementarias como análisis de sangre y de orina. El objetivo es diagnosticar anemias, infección de orina y el control de anticonceptivos.

PCR VIRUS DEL PAPILOMA HUMANO (VPH)

Se realiza en aquellos casos que existe anormalidades en la citología o factores de riesgo (promiscuidad sexual, antecedentes de infección por VPH).

PRESERVACIÓN DE LA FERTILIDAD

Durante la vista ginecología si no quieres quedarte embarazada se te planteará la posibilidad de congelar tus óvulos para poder ser madre más adelante. 

La reserva folicular disminuye con la edad, e incluso en algunos casos, aun siendo la paciente joven dicha reserva puede estar disminuida. 

Para valorarte se te puede realizar la determinación de la hormona Antimulleriana, cuyo resultado es muy indicativo de cómo está tu reserva folicular.

Si tienes más de 45 años

En esta etapa, además de lo que se hace habitualmente, se te realizará una mamografía anual y una ecografía mamaria si lo precisas.

En esta etapa vas a entrar en la MENOPAUSIA.

MENOPAUSIA

La menopausia es el momento de tu vida en el que dejas de tener la regla. Suele ocurrir entre los 45 y los 55 años. La edad promedio son los 51.

Comienza cuando tus ovarios dejan de producir estrógenos (que son hormonas sexuales) y disminuyen también la producción de otras hormonas reproductivas como la progesterona. Se puede considerar que has llegado ya a la menopausia cuando dejas de tener la regla durante un año seguido.

Es una época distinta en la vida de una mujer. No solo cambia tu cuerpo y deja de ser fértil, sino que emocionalmente también puedes sufrir alteraciones de ánimo y humor. 

Es una nueva etapa: saber qué consecuencias va a tener el descenso hormonal y prevenirlas en la medida de lo posible, va a ayudarte a vivir este momento de una forma más tranquila y relajada. Con total plenitud y libertad igual que las anteriores. Disfrútala.

SEÑALES Y SÍNTOMAS DE LA MENOPAUSIA

Los síntomas de que está llegando la menopausia son distintos en cada mujer. Suelen aparecer de forma progresiva antes de la retirada total de la regla. En general es normal que sufras alguno de estos cambios:

  • REGLA IRREGULAR

Durante la pre-menopausia es frecuente dejar de menstruar algún mes o varios meses seguidos para luego volver y comenzar los ciclos unos meses más. También es habitual que los periodos menstruales se acorten, es decir, que tengas la regla cada menos de 28 días. Ten cuidado en esta etapa, a pesar de estos desarreglos puede llegar el embarazo, así que toma precauciones si no lo deseas.

  • SOFOCOS

Los calores súbitos durante la menopausia son frecuentes. Pueden ser leves o, por el contrario, muy incómodos y durar años. 

Cuando ocurren por la noche se llaman sudores nocturnos. No debes asumir estos sofocos como una molestia que tienes que aguantar. Hay maneras de mejorarlos. Consúltalo a tu ginecólogo/a y te ayudará. 

Antes de medicarte es importante que intentes primero cambiar ciertos hábitos durante 3 meses:

  • Mantén tu habitación fría.
  • Deja fuera de la habitación los aparatos electrónicos: mejor un libro que la TV o el móvil.
  • Deja un vaso de agua al lado de la cama por si te entra un sofoco.
  • Si duermes acompañada, prueba a dormir sola.
  • Duerme con varias capas de sábanas en lugar de con un edredón para poder destaparte si llega el sofoco.
  • Vístete igual, a capas para poder ir quitándote la ropa que te moleste cuando tengas un calor súbito.
  • Evita el alcohol o las comidas picante y la cafeína.
  • Trata de mantener un peso saludable.
  • Haz ejercicio.
    • Intenta practicar disciplinas que conecten tu cuerpo y tu mente como yoga, mindfulness o tai chi. Hay estudios que demuestran que la atención plena y la meditación ayudan a mejorar los síntomas.
  • PÉRDIDA DE CINTURA Y AUMENTO DE PESO

La disminución de la producción de estrógenos en la pre-menopausia y la menopausia provoca a su vez un aumento de hormonas masculinas que hacen que se incremente el nivel de grasa de la mujer, sobretodo en la cintura. 

El 75% de mujeres aumenta entre 5 y 10 kg su peso. Para ellos es muy importante que lleves una vida saludable y te muevas.

  • Realiza ejercicio que acelere tu ritmo cardiaco entre 30 y 45 minutos 5 días a la semana: caminar, nadar, correr o ir en bici. Si puede ser todos los días y un poco más de tiempo, mejor.
  • Come 5 veces al día y cantidades más pequeñas.
  • Bebe entre 1,5 y 2 litros de agua.
  • Come de más a menos: desayuno abundante, comida normal y cena frugal.
  • Reduce la cantidad de sal y de azúcar.
  • Reduce la ingesta de grasa y los productos ultra procesados.
  • Eleva el consumo de hidratos de carbono complejos: pasta, arroz y pan integrales, copos de avena, pan de centeno…
  • La carne, mejor magra.
    • Intenta comer de forma consciente (sin TV ni distracciones) y masticando bien, comerás menos.
  • INSOMNIO

Muchas veces el insomnio se debe a los sofocos nocturnos que provoca la reducción del estrógeno durante la menopausia. Intenta no medicarte y pon en práctica el cambio de hábitos que hemos comentado.

  • IRRITABILIDAD

Los cambios hormonales en la menopausia no solamente conlleva cambios físicos sino también psicológicos que afectan a tu estabilidad emocional y pueden provocarte, además de irritabilidad, tristeza, ansiedad o estrés. 

Para sobrellevar mejor este momento, es importante que te cuides y que empieces a quererte y a mirar por ti. Dedícate tiempo, descansa, haz ejercicio, come sano, medita, potencia tus relaciones sociales… Y si te encuentras emocionalmente mal, acude a un/una piscólogo/a  para que te ayude.

  • SEQUEDAD VAGINAL (ATROFIA VAGINAL)

Ocurre normalmente después de la menopausia. Es el adelgazamiento, sequedad e inflamación de la pared vaginal debido a la disminución del estrógeno. Puede provocar incómodas relaciones sexuales e infecciones vaginales y del tracto urinario.

Consulta nuestra especialidad de Urología en el apartado MUJER para saber las patologías femeninas más recurrentes

RIESGOS PARA LA SALUD EN ESTA ETAPA

  • ENFERMEDADES DE CORAZÓN
  • HIPERTENSIÓN
  • COLESTEROL
  • OSTEOPOROSIS

A partir de los 45 años es importante que te realices una densitometría para valorar en qué estado tienes la masa ósea ya que con la pérdida de estrógenos que sufres a esta edad, la pérdida de masa ósea se acelera. 

En los casos en los que sea normal o si tienes osteopenia, es decir, una disminución no patológica, lo más recomendable es que mantengas unos hábitos de vida saludables (dieta variada y ejercicio físico).

Si por el contrario existe osteoporosis hay medicación específica para tratarla.

CÁNCER DE MAMA

DIABETES

TRATAMIENTOS PARA LOS SOFOCOS

Hay medicamentos para tratar los sofocos si los cambios en tus hábitos de vida no son suficientes:

La paroxetina (un antidepresivo de baja dosis) puede ayudarte con una dosis inferior a la que se toma una persona con depresión.

Algunas mujeres pueden optar por tomar hormonas que estabilizan los niveles de estrógeno y progesterona. Es un tratamiento muy efectivo, pero no exento de riesgos para tu salud.

NO TE AUTOMEDIQUES NUNCA. Pregunta siempre a tu ginecólogo/a cuál es el mejor tratamiento para ti.

¿Cuándo debes consultar a tu ginecólogo/a?

Debes continuar con tus revisiones anuales para prevenir cualquier patología. Cuéntale a tu ginecólogo/a cualquier inquietud o síntoma que tengas y sobre todo, acude de forma urgente si tienes sangrado vaginal después de la menopausia

Si tienes más de 80

Y no existe patología ginecológica, las revisiones se harán cada 2 años.